Según estudios científicos cuando procesamos emociones positivas nuestras pupilas se dilatan, y aún se dilatan más con emociones negativas. Por lo tanto cuando una mujer te mira y notas que sus pupilas están algo dilatas, tranquilo, no se ha metido nada ni es un vampiro, eso es que le gustas. Es como si sus ojos dijeran "!vamos, vamos abriros de par en par que esto es interesante, hay que captar cada detalle¡".
El inconveniente para verlo en los ojos de la chica que se muere por tus huesos es que necesitas estar en un sitio con suficiente luz para diferenciar el iris de la pupila.
!Ya sabéis seductores, a dilatar esas pupilas femeninas¡